Publicado el: 2025-11-19 Actualizado el: 2025-11-20
Nvidia está a punto de experimentar la que podría ser la mayor fluctuación de su valor de mercado en un solo día tras la publicación de sus resultados. Los datos del mercado de opciones sugieren que los operadores prevén un movimiento de aproximadamente el 7% al alza o a la baja tras la publicación de los resultados de la compañía.
Con la valoración actual de Nvidia en aproximadamente 4,6 billones de dólares estadounidenses, tal movimiento se traduciría en una fluctuación estimada de 320 mil millones de dólares en la capitalización de mercado. Este grado de volatilidad implícita pone de manifiesto la importancia crucial que Nvidia sigue teniendo en la configuración de las perspectivas de inversión en torno a la infraestructura de IA.

Los analistas prevén un sólido crecimiento de los ingresos: las estimaciones consensuadas sitúan los ingresos del tercer trimestre del ejercicio fiscal 2026 en torno a los 54.800-54.900 millones de dólares estadounidenses, lo que representa un aumento interanual de aproximadamente el 56%.
En cuanto a la rentabilidad, se prevé que las ganancias ajustadas por acción (EPS) se sitúen entre 1,24 y 1,25 dólares estadounidenses, lo que supone un aumento de aproximadamente el 54 % con respecto al año anterior.
Gran parte del sólido crecimiento previsto de los ingresos se basa en el negocio de centros de datos de Nvidia, en particular en su arquitectura Blackwell. Según las previsiones, el segmento de centros de datos podría representar la gran mayoría de los ingresos del tercer trimestre, impulsado por el continuo gasto de capital de los grandes proveedores de servicios en la nube y las empresas.
Esto coincide con las propias revelaciones anteriores de Nvidia: en el segundo trimestre del año fiscal 2026, la compañía reportó ingresos de centros de datos por US$41.100 millones, un 56% más que el año anterior, con un aumento secuencial del 17% en las ventas de centros de datos basados en Blackwell.

Aunque la demanda sigue siendo fuerte, varios riesgos estructurales podrían afectar la capacidad de Nvidia para mantener su impulso.
Los analistas han destacado desafíos como las limitaciones en la cadena de suministro, la escasez de energía e infraestructura y las presiones geopolíticas, especialmente las relacionadas con las exportaciones de chips a China.
Cabe destacar que las perspectivas de Nvidia para el tercer trimestre no contemplan ninguna venta de sus chips H200 (H20) en China, lo que refleja la incertidumbre regulatoria y de control de exportaciones en curso.
Incluso suponiendo que se superen las expectativas, los inversores analizarán con lupa no solo las cifras principales, sino también la evolución de los márgenes. Las previsiones anteriores de Nvidia apuntaban a márgenes brutos no GAAP en torno al 73,5%, ± 50 puntos básicos.
Además, existe un debate creciente sobre la sostenibilidad del ciclo de inversión en IA. Si bien la plataforma Blackwell de Nvidia sigue siendo un motor fundamental de la demanda, los inversores estarán ansiosos por obtener claridad sobre el gasto a largo plazo de los hiperescaladores.

Debido a que Nvidia ocupa un papel tan fundamental en la infraestructura de IA, su informe de ganancias se considera algo más que una simple actualización financiera: es un indicador de la salud del ciclo de inversión en IA.
Un buen desempeño y unas previsiones optimistas podrían reforzar la idea de que el desarrollo de la IA todavía está en sus inicios; una perspectiva cautelosa o un debilitamiento podrían desencadenar una reevaluación más amplia de la estrategia de inversión en el sector tecnológico.
Dada la envergadura de Nvidia, que representa una parte significativa de los principales índices, su reacción posterior a la publicación de resultados tiene el potencial de repercutir en las operaciones correlacionadas en las industrias de semiconductores, nube e inteligencia artificial.
Esto implica que los resultados de la empresa pueden influir en mucho más que el precio de sus propias acciones, pudiendo redirigir los flujos de capital, modificar la aversión al riesgo y alterar el posicionamiento de los inversores en todo el sector tecnológico.
Ingresos frente a previsiones:
Si los resultados reales superan o no las previsiones de unos 54.000 millones de dólares.
Perfil de BPA y margen:
Cualquier sorpresa en las ganancias o el margen bruto podría reconfigurar las narrativas de valoración.
Detalle de la demanda del centro de datos:
Análisis comparativo de Blackwell frente a otras arquitecturas, la solidez de los pedidos de hiperescala y las limitaciones de suministro.
Comentario sobre gastos de capital:
El tono y las directrices de la dirección sobre el gasto a largo plazo en infraestructuras de IA.
Exposición a China:
Debate sobre los envíos de H200/H2O a China, el riesgo regulatorio y las perspectivas de la demanda.
Eficiencia de liquidez/gastos de capital:
Cómo Nvidia planea escalar la producción (y la rentabilidad) en medio de una alta demanda y presiones de costos.
Los resultados de Nvidia sirven como indicador en tiempo real del gasto global en infraestructura de IA. Dado que sus GPU dominan la computación avanzada, cualquier cambio en la demanda, los márgenes o las previsiones puede modificar las expectativas para los sectores de semiconductores y tecnología en general.
Los analistas prevén una sólida demanda de centros de datos, impulsada por la expansión de la capacidad de entrenamiento de IA por parte de los proveedores de la nube. La arquitectura Blackwell de Nvidia también está acelerando los ciclos de actualización, lo que se traduce en importantes incrementos interanuales de ingresos y beneficios en comparación con otras grandes empresas tecnológicas.
Los mercados de opciones presentan una volatilidad inusualmente alta debido a que la valoración de Nvidia está estrechamente ligada a los ciclos de inversión en inteligencia artificial. Incluso pequeñas sorpresas en los ingresos, los márgenes o las previsiones podrían provocar grandes fluctuaciones dada su elevada ponderación en los principales índices bursátiles.
Entre los principales riesgos se incluyen las limitaciones de la cadena de suministro, la incertidumbre geopolítica, especialmente en lo que respecta a China, y posibles reducciones en los presupuestos de IA de los hiperescaladores. Cualquier presión sobre los márgenes o la capacidad podría poner en peligro la capacidad de Nvidia para mantener su trayectoria de crecimiento actual.
Dado que Nvidia es un pilar fundamental del ecosistema de hardware para IA, sus ganancias suelen influir en todo el sector de semiconductores y computación en la nube. Unos resultados sólidos podrían mejorar el ánimo del sector, mientras que unas previsiones cautelosas podrían provocar una revisión más amplia de las valoraciones y el gasto relacionados con la IA.
La próxima publicación de resultados de Nvidia se perfila como un momento crucial para la compañía y para el ecosistema de IA en general. La expectativa del mercado de una fluctuación en su valoración de 320 mil millones de dólares subraya tanto el entusiasmo como el riesgo inherentes a su valoración actual.
Si Nvidia presenta resultados sólidos con previsiones optimistas, podría reforzar la idea de que la revolución de la IA está lejos de alcanzar su punto máximo, lo que potencialmente reactivaría la inversión en infraestructura a nivel mundial. Pero si muestra cautela, podría provocar una reevaluación más amplia de cuánto más gasto de capital están dispuestos a invertir los hiperescaladores.
Para inversores, analistas y observadores del mercado, el evento representa una prueba crucial. ¿Podrá Nvidia demostrar que su elevada valoración se sustenta en una sólida ejecución y una demanda sostenida, o marcará este momento el punto en que el entusiasmo por el gasto en IA comience a disminuir?
Descargo de responsabilidad: Este material tiene fines meramente informativos y no pretende ser (ni debe considerarse como) asesoramiento financiero, de inversión o de otro tipo en el que deba depositarse confianza. Ninguna opinión expresada en este material constituye una recomendación por parte de EBC ni del autor de que ninguna inversión, valor, transacción o estrategia de inversión en particular sea adecuada para ninguna persona específica.