Publicado el: 2025-11-20
La pregunta «¿qué respalda al dólar estadounidense?» sigue vigente, incluso décadas después de que Estados Unidos abandonara el patrón oro. Hoy, la respuesta no es una materia prima como el oro o la plata; más bien, el valor del dólar se basa en una compleja estructura de confianza, fortaleza económica y mecanismos institucionales.
En este artículo, examinaremos cómo se sustenta el dólar estadounidense en la era moderna, trazando su evolución histórica, explorando sus fundamentos actuales y evaluando los riesgos.

Durante gran parte de su historia, el dólar estadounidense estuvo vinculado al oro. Bajo el sistema de Bretton Woods (establecido en 1944), los bancos centrales extranjeros podían convertir dólares en oro a una tasa fija de 35 dólares por onza troy.
En diciembre de 1971, tras las presiones económicas, el Acuerdo Smithsonian revaluó el oro a 38 dólares estadounidenses por onza y permitió que las divisas fluctuaran dentro de una banda.
Poco después, el presidente Nixon puso fin a la convertibilidad directa del dólar en oro, un acontecimiento conocido como el "Shock de Nixon", que finalmente llevó a Estados Unidos a abandonar por completo el patrón oro.
Desde 1971, el dólar estadounidense ha funcionado como una moneda fiduciaria, lo que significa que no está respaldado por ningún bien físico.
Su valor deriva de la "plena fe y crédito" del gobierno estadounidense, es decir, de su capacidad para recaudar impuestos, su autoridad para emitir deuda y la obligación legal de aceptarla como pago.

La economía estadounidense sigue siendo una de las más grandes y estables del mundo, con un alto grado de diversificación en sectores como la tecnología, las finanzas, la atención médica y la manufactura.
La estabilidad política, el estado de derecho y unos mercados de capitales profundos y líquidos refuerzan aún más la confianza en el dólar estadounidense.
El Tesoro de Estados Unidos tiene la facultad legal para recaudar impuestos y emitir deuda. Los inversores compran bonos del Tesoro estadounidense porque se consideran, en general, activos seguros y solventes.
El Fondo de Estabilización Cambiaria (FEC), un instrumento separado del Tesoro para las intervenciones en el mercado de divisas, contaba con activos por un valor aproximado de 210.000 millones de dólares estadounidenses a finales de 2024.
La Reserva Federal influye en el valor del dólar a través de la política de tipos de interés, la gestión de la oferta monetaria y el control de la inflación.
Su función ayuda a mantener la confianza en el dólar, especialmente en tiempos de incertidumbre global, al actuar como una fuerza estabilizadora.
Según la Reserva Federal, en 2024 el 58% de las reservas mundiales de divisas declaradas estaban denominadas en dólares estadounidenses.
Sin embargo, la participación del dólar en las reservas internacionales ha disminuido ligeramente. Según Wolf Street, a finales de 2024, la participación del dólar en las reservas internacionales asignadas cayó al 57,8%, el nivel más bajo desde 1994.
Según Brookings, el dólar sigue profundamente arraigado en el comercio mundial, los flujos de capital y las finanzas transfronterizas.
Los datos de un informe económico del gobierno estadounidense (2025) muestran que alrededor del 54% del comercio internacional se factura en dólares estadounidenses y el 64% de los títulos de deuda internacionales están denominados en dólares.
Estados Unidos aún mantiene una importante reserva de oro, aunque no la utiliza para canjear divisas.
Según los datos accesibles de la Reserva Federal (2025), Estados Unidos posee millones de onzas troy de oro fino, y su participación fluctúa con el tiempo.
Los datos de una encuesta de bancos centrales (Consejo Mundial del Oro, mediados de 2025) indican que el 43% del total de las reservas declaradas (divisas + oro) estaban denominadas en dólares estadounidenses, lo que subraya una demanda persistente pero en evolución.
Debido a que Estados Unidos emite la principal moneda de reserva mundial, disfruta de lo que a veces se denomina un "privilegio exorbitante": la capacidad de financiar déficits a un costo relativamente bajo.
Estados Unidos se beneficia de la fuerte demanda mundial de bonos del Tesoro, lo que ayuda a mantener bajos los rendimientos.
Los profundos mercados de capitales y la amplia aceptación del dólar hacen que los valores estadounidenses sean altamente líquidos y atractivos para los tenedores extranjeros.
En tiempos de crisis, los inversores suelen acudir al dólar como refugio seguro.
El valor del dólar depende en gran medida de la confianza global en las instituciones y la gestión económica de Estados Unidos. Una pérdida de confianza podría debilitar la moneda.
Los bancos centrales han estado diversificando sus reservas en otras monedas y oro, lo que podría reducir gradualmente el dominio del dólar.
Como moneda fiduciaria, el dólar está expuesto al riesgo de inflación; si las políticas de la Reserva Federal no logran mantener la estabilidad de precios, el poder adquisitivo del dólar podría verse erosionado.
| Aspecto | Dólar estadounidense | Otras monedas importantes |
|---|---|---|
| Porcentaje de las reservas mundiales de divisas (2024) | ~58 % | Euro ~20 %, yen ~6 %, renminbi ~2 % |
| Facturación del comercio mundial | ~54 % en USD | Otras monedas representan porcentajes menores. |
| valores de deuda globales | ~64 % denominado en USD | Menor participación para otros |

Aunque el dólar sigue siendo la moneda dominante, su participación en las reservas de los bancos centrales ha disminuido ligeramente. Las innovaciones tecnológicas y financieras, como las monedas estables y las criptomonedas, podrían modificar la dinámica de la demanda.
Los riesgos políticos y económicos (como los cambios en la política fiscal, los cambios geopolíticos o la disminución de la confianza) representan posibles obstáculos para la base actual del dólar.
A1: No, el dólar estadounidense ya no está respaldado por oro. Estados Unidos eliminó la convertibilidad del dólar en oro en 1971 y ahora opera con un sistema de moneda fiduciaria.
A2: Significa que el dólar está respaldado por la capacidad del gobierno estadounidense de recaudar impuestos y emitir deuda, junto con su autoridad legal para exigir el uso del dólar en las transacciones.
A3: Los bancos centrales mantienen el dólar debido a su estabilidad, liquidez y uso generalizado en el comercio y las finanzas internacionales, lo que lo convierte en una moneda de reserva preferida.
A4: Estados Unidos posee una reserva sustancial de oro, medida en millones de onzas troy finas, pero estas reservas no respaldan directamente la moneda en circulación.
A5: Los riesgos incluyen una pérdida de confianza en las instituciones estadounidenses, una inflación creciente y la diversificación de los bancos centrales hacia otras monedas o activos.
El dólar estadounidense actual no está respaldado por un bien físico como el oro. Su fortaleza radica en una sólida combinación de poderío económico, credibilidad institucional y demanda global. La confianza en el gobierno de Estados Unidos, junto con la profundidad de sus mercados financieros y el uso generalizado de su moneda de reserva, constituyen la base del valor del dólar.
Aunque persisten desafíos y riesgos, esta estructura ha demostrado ser extraordinariamente duradera y respalda al dólar como pilar del sistema financiero mundial.
Descargo de responsabilidad: Este material tiene fines meramente informativos y no pretende ser (ni debe considerarse como) asesoramiento financiero, de inversión o de otro tipo en el que deba depositarse confianza. Ninguna opinión expresada en este material constituye una recomendación por parte de EBC ni del autor de que ninguna inversión, valor, transacción o estrategia de inversión en particular sea adecuada para ninguna persona específica.