Los precios al consumidor aumentaron un 2,7% en noviembre, en línea con las estimaciones, lo que pone de relieve que la inflación sigue siendo una preocupación tanto para los hogares como para los responsables de las políticas.
La libra esterlina cayó el miércoles tras poner fin a una caída de cinco días, con las preocupaciones sobre la sostenibilidad fiscal de Gran Bretaña pesando sobre la moneda.
El dólar australiano se acercaba a su máximo el martes. La inflación se desaceleró al 3,6% en abril, pero es poco probable que caiga al objetivo del 2-3% hasta 2025.
La libra esterlina bajó el miércoles porque es probable que el BOE mantenga los tipos estables y dé señales de confianza en las tendencias de la inflación en la reunión del jueves.
El dólar canadiense se estabilizó después de unos datos de empleo de diciembre mejores de lo esperado, y los especuladores elevaron sus apuestas bajistas a máximos históricos.
La rápida recuperación posterior a la epidemia impulsó un breve mercado alcista de las materias primas. La alta inflación esperada durante años beneficiará al mercado de materias primas.