El oro se mantuvo cerca de su máximo histórico, superando los 2.900 dólares, mientras los inversores evaluaban las recientes declaraciones de Trump sobre sus planes para implementar medidas arancelarias.
El presidente anunció que su administración impondrá aranceles del 25% a la Unión Europea, aunque no especificó si estos afectarán a todas las exportaciones del bloque o solo a ciertos productos o sectores.
Esto probablemente elevará el riesgo de una amplia guerra comercial transatlántica e infligirá mayores daños a los ya debilitados lazos diplomáticos entre los aliados occidentales.
Pero precisó que los gravámenes a México y Canadá entrarán en vigor el 2 de abril, postergándose respecto a la fecha inicialmente prevista del 4 de marzo. La confianza del consumidor canadiense registró en febrero su punto más bajo desde 2023.
El primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal, anunció un importante acuerdo con Estados Unidos para la exportación de minerales, a cambio de garantías de seguridad destinadas a consolidar una paz duradera.
Por otro lado, la tregua de 42 días entre Israel y Hamás expirará este fin de semana, salvo que ambas partes acuerden su prórroga. Sin embargo, hasta ahora no se han iniciado conversaciones para alcanzar un acuerdo permanente que ponga fin al conflicto.
El oro está consolidando sus recientes ganancias, aunque una divergencia bajista del MACD sugiere que podrían surgir más dificultades en el futuro. Como resultado, es probable que se observe un impulso por debajo de los 2.900 dólares.
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